LA GUERRA CON EL PERÚ
El 5 de julio de 1941, las Fuerzas Armadas del Perú atacaron por sorpresa la población de Chacras y procedieron a ocupar, apoyados por su aviación de combate, la provincia de El Oro con tropas aerotransportadas, infantería y blindados. Continuó los días 6 y 7 con el bloqueo naval del Golfo de Guayaquil y el ataque a las provincias de Loja, Zamora Chinchipe y otras provincias orientales que pronto cayeron y quedaron dominadas ante la arrolladora superioridad del enemigo. La heroica defensa, casi suicida, del Ejército Ecuatoriano y la Armada no logró impedir la consolidación de las tropas invasoras en los territorios ocupados. Ni qué decir de nuestra aviación, apenas tres Curtiss Sparrow estuvieron en capacidad de llegar al teatro de operaciones para llevar a cabo aisladas misiones de reconocimiento y enlace.
A pesar de estas limitaciones, el 23 de julio, el Capitán Aníbal León abatió con su ametralladora ZB al avión de combate NA-50, N° XXI-41-3, tripulado por el Capitán FAP José A. Quiñones y el 25 de julio, en desigual combate aeronaval librado en aguas del Golfo de Jambelí, el grumete artillero Eleuterio Chalá, del aviso Atahualpa, derribó un avión cazabombardero Caproni de la FAP que se estrelló cerca de la población orense de Balzalito.
Todo el personal de la aviación militar ecuatoriana, que constaba detallado en el oficio N° 547H del 24 de julio de 1941, y que estaba conformado por 2 jefes, 36 Oficiales pilotos, 4 Oficiales de servicio y 219 miembros de tropa, más 506 hombres sin armas, que integraban la reserva aérea, realizaron innumerables esfuerzos para emplear los escasos y obsoletos recursos materiales con los que se contaba en aquella época. Sin embargo, el espíritu de sacrificio de este contingente militar de 767 valerosos hombres logró la autorización ministerial correspondiente para trasladarse en pleno al frente de combate.
Como se ha dicho, los tres únicos aviones militares ecuatorianos en 1941, que cumplieron con misiones de reconocimiento, observación, transporte de autoridades y de heridos entre Guayaquil, Cuenca, Santa Rosa, el Golfo de Guayaquil y el Archipiélago de Jambelí, fueron los biplazas de entrenamiento Curtiss-Wright CW-19R Sparrow, distinguidos con los números 50, 51 53, según testimonio del Registro de Vuelos de la Base Aérea Simón Bolívar, el mismo que reposa en el Archivo de la Comandancia de la Fuerza Aérea.
Estos aparatos fueron tripulados por los ejemplares Oficiales pilotos, Mayor Leonidas Hidalgo, Capitanes Bayardo Tobar y Gonzalo García, Tenientes Bolívar Pico, Teodoro Carrión, Rafael Ramos y Alfredo Arteaga, y los Subtenientes Víctor Suárez Haz y Luís Arias Guerra.
Mientras las tropas peruanas ocupaban el sur de nuestro territorio, los cuatro países mediadores en este conflicto: Argentina, Brasil, EEUU y Chile, buscaban una fórmula para solucionar el problema y se reunieron en Río de Janeiro en enero de 1942, para la Tercera Conferencia de Cancilleres de América, en la que adoptaron resoluciones urgentes que debían asegurar ante todo la seguridad, la unidad y solidaridad continentales. En esta reunión el Ecuador se vió obligado a firmar un convenio al que se lo llamó de “Paz, Amistad y Límites”, el 29 de enero de 1942, en Brasilia. Allí se estimó y acordó que todo problema interamericano, o entre naciones del mismo hemisferio, tendría que ser ineludiblemente solucionado, pensando en beneficio de la citada unidad y solidaridad continentales frente a la guerra total que se avecinaba en Europa y el mundo.
LAS FUERZAS AEREAS DEL ECUADOR ESTARÁN AL FRENTE DEL MANDO EN EL AIRE
A pesar de estas limitaciones, el 23 de julio, el Capitán Aníbal León abatió con su ametralladora ZB al avión de combate NA-50, N° XXI-41-3, tripulado por el Capitán FAP José A. Quiñones y el 25 de julio, en desigual combate aeronaval librado en aguas del Golfo de Jambelí, el grumete artillero Eleuterio Chalá, del aviso Atahualpa, derribó un avión cazabombardero Caproni de la FAP que se estrelló cerca de la población orense de Balzalito.
Todo el personal de la aviación militar ecuatoriana, que constaba detallado en el oficio N° 547H del 24 de julio de 1941, y que estaba conformado por 2 jefes, 36 Oficiales pilotos, 4 Oficiales de servicio y 219 miembros de tropa, más 506 hombres sin armas, que integraban la reserva aérea, realizaron innumerables esfuerzos para emplear los escasos y obsoletos recursos materiales con los que se contaba en aquella época. Sin embargo, el espíritu de sacrificio de este contingente militar de 767 valerosos hombres logró la autorización ministerial correspondiente para trasladarse en pleno al frente de combate.
Como se ha dicho, los tres únicos aviones militares ecuatorianos en 1941, que cumplieron con misiones de reconocimiento, observación, transporte de autoridades y de heridos entre Guayaquil, Cuenca, Santa Rosa, el Golfo de Guayaquil y el Archipiélago de Jambelí, fueron los biplazas de entrenamiento Curtiss-Wright CW-19R Sparrow, distinguidos con los números 50, 51 53, según testimonio del Registro de Vuelos de la Base Aérea Simón Bolívar, el mismo que reposa en el Archivo de la Comandancia de la Fuerza Aérea.
Estos aparatos fueron tripulados por los ejemplares Oficiales pilotos, Mayor Leonidas Hidalgo, Capitanes Bayardo Tobar y Gonzalo García, Tenientes Bolívar Pico, Teodoro Carrión, Rafael Ramos y Alfredo Arteaga, y los Subtenientes Víctor Suárez Haz y Luís Arias Guerra.
Mientras las tropas peruanas ocupaban el sur de nuestro territorio, los cuatro países mediadores en este conflicto: Argentina, Brasil, EEUU y Chile, buscaban una fórmula para solucionar el problema y se reunieron en Río de Janeiro en enero de 1942, para la Tercera Conferencia de Cancilleres de América, en la que adoptaron resoluciones urgentes que debían asegurar ante todo la seguridad, la unidad y solidaridad continentales. En esta reunión el Ecuador se vió obligado a firmar un convenio al que se lo llamó de “Paz, Amistad y Límites”, el 29 de enero de 1942, en Brasilia. Allí se estimó y acordó que todo problema interamericano, o entre naciones del mismo hemisferio, tendría que ser ineludiblemente solucionado, pensando en beneficio de la citada unidad y solidaridad continentales frente a la guerra total que se avecinaba en Europa y el mundo.
LAS FUERZAS AEREAS DEL ECUADOR ESTARÁN AL FRENTE DEL MANDO EN EL AIRE
Saludos extraordinario resumen una consulta el oficio 547 de 24 de julio de 1941 donde se lo encuentra?
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